La mayoría de los niños que ingresan con sospecha de meningitis que pueda dejar consecuencias graves en el mismo pueden ser diagnosticados en un intervalo de 12 horas desde el ingreso en el centro sanitario. Las cifras de morbilidad por meningitis neonatal han permanecido elevadas durante mucho tiempo a pesar de los avances en el diagnóstico y terapéutica. Microorganismos que tienen alta capacidad de virulencia o factores de riesgo del enfermo así como el diagnóstico y el tratamiento tardío, determinan la considerable frecuencia de secuelas de esta enfermedad. Muchos predictores se han usado para intentar conocer las posibles consecuencias o secuelas derivadas de la infección, pero que han servido únicamente para predecir de un modo intuitivo el pronóstico de los pacientes. Gracias a un estudio publicado en la revista Pediatrics, se ha elaborado un algoritmo que permite determinar el pronóstico de los pacientes neonatos afectos de meningitis bacteriana. Gracias al mismo,...